“Nuestro sindicato se esfuerza por proteger a los trabajadores de Alphabet, nuestra sociedad global y nuestro mundo. Promovemos la solidaridad, la democracia y la justicia social y económica”, reza la portada principal de la web de la Unión de Trabajadores de Alphabet (Alphabet Workers Union en inglés), el sindicato de los colaboradores de Google, el primero que se creó de entre las grandes compañías tecnológicas.
Después de un año de organización en secreto, más de 200 trabajadores de Alphabet Inc, empresa matriz de Google, se unieron, no para pedir mejoras salariales, sino para luchar por que se cumplan los principios de igualdad en el trabajo y los principios éticos en el modelo de negocio.
La formación de este sindicato es inédita, ya que dentro del mundo de Silicon Valley, históricamente no se registran el activismo sindical o la negociación colectiva, en parte porque los beneficios laborales y las buenas pagas estuvieron siempre presentes. Sin embargo, como bien lo aclararon, ese no es el fin de esta unión, ya que se empezó a gestar a partir de los casos de acoso sexual por parte de altos ejecutivos de la compañía, así como por la colaboración que ha hecho la empresa con el ejército estadounidense, ambos hechos repudiables para muchos de sus empleados.
Cualquier trabajador de Alphabet podrá afiliarse mediante el pago de una cuota equivalente al 1% de sus ingresos, cifra que puede servir para solventar actividades, equipo legal e incluso una caja de resistencia en caso de una huelga laboral. La mayoría de los afiliados trabajan en Silicon Valley, pero el resto de los integrantes se encuentran en Nueva York, Massachusetts y Colorado.
Pese al impacto que ha tenido la formación del sindicato, este está lejos de obtener el reconocimiento como figura de negociación colectiva en Estados Unidos, ya que la ley exige que estén representados al menos el 30% de los trabajadores de un centro de trabajo o de una división en concreto. Y hasta ahora, el sindicato tiene un alcance leve: apenas representa 225 trabajadores de los 120.000 que tiene todo el grupo.
El anuncio de la Unión de Trabajadores de Alphabet hizo que Google sacara un comunicado diciendo que la empresa siempre ha intentado crear un lugar de trabajo gratificante y que no tiene intenciones de negociar directamente con el sindicato.
The New York Times explicó en una publicación que el sindicato de Google quiere ir más allá de las condiciones laborales y reclamar asuntos como el acoso sexual, las discriminaciones por razón de género o de raza en el trabajo, así como tratar las cuestiones éticas sobre la compañía, como sus políticas de privacidad o posibles abusos de posición dominante en el mercado.
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