La confusión mental le puede pasar a cualquiera, especialmente en medio de una pandemia. Comer los nutrientes adecuados y dormir bien puede ayudar. O para una solución más activa, se puede recurrir al yoga, porque este puede ayudar a despejar la niebla mental y hacer que los días sean más tranquilos.
Practicar yoga tiene una larga lista de beneficios para el cerebro, que incluyen una reducción de la ansiedad y una mejor memoria. También funciona para combatir una mente confusa de varias maneras. “El yoga ayuda a aliviar la confusión mental, o mejorar su concentración, por dos razones”, dice Lindsay Pirozzi , instructora de yoga de Nueva York. “Mejora nuestro tono vagal, y el yoga, junto con el trabajo de respiración y la meditación, ayuda a desarrollar la corteza prefrontal izquierda de nuestro cerebro”, agrega.
Además, el nervio vago, parte del sistema nervioso parasimpático de lucha o huida, se estimula con la respiración diafragmática, que se usa en el yoga, explica Pirozzi. “Cuando la corteza funciona de manera saludable, tenemos una mayor capacidad para resolver problemas, un mejor juicio y habilidades del lenguaje, que a menudo se ven comprometidas por la niebla mental”, dice ella.
“La mayoría de las prácticas de yoga comparten la idea de que nuestra conciencia individual, cuánto notamos las cosas, puede mejorar”, dice Ross Rayburn , instructor de yoga. “Al igual que el ejercicio puede ayudar a despejar la niebla del cerebro, el ejercicio con conciencia y otras prácticas yóguicas pueden tener un efecto de base y pueden cambiar su perspectiva”, dice.
El beneficio de ponerse boca abajo
Si bien los profesionales del yoga dicen que cualquier tipo de práctica puede brindarle beneficios para aclarar la mente, Rayburn señala que ponerse boca abajo puede ser particularmente efectivo. “Existe alguna evidencia de que las inversiones, que van desde el perro hacia abajo hasta la parada de cabeza, incluso las piernas subiendo por la pared, pueden ayudar con la confusión mental”, dice. Y los movimientos centrados en el núcleo también son buenos.
“Cuando el núcleo está débil y la columna está comprimida, no tenemos acceso completo a nuestro diafragma”, dice Pirozzi. “Cualquier postura que incluya flexiones hacia atrás, giros y trabajo central profundo es especialmente útil”. Así que levanta estas poses cada vez que la niebla vuelva a atacar, añaden en un reporte a Well + Good.

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