Estilo de vidaDe acceso gratuito, lo primero que llama la atención es su hermosa arquitectura, imponente en la altura y con jardines preciosos. También sus obras de arte moderno y contemporáneo, aunque sin olvidarnos de la curiosa historia familiar.
Por: Silvia Jung
Para los que aman el arte existen destinos imperdibles. Si bien, muchos conocen los museos de Europa, los de los Estados Unidos también ofrecen un gran acervo artístico y bellos diseños arquitectónicos.
El Getty Center es el museo privado del magnate J.Paul Getty (1892-1976). El empresario de la industria petrolera que en 1974, abrió su museo cerca de Malibú recreando la Villa de los Papiros de la Antigua Herculiano y que posteriormente, en 1997 cambia su locación a la ubicación a la actual, en Brentwood de la ciudad de Los Ángeles.
El museo cuenta con colecciones de arte moderno y contemporáneo y además, con la reforma en el 2006, se agregó un centro de investigación, sala de conferencias y la oficina administrativa de la Fundación J. Paul Getty, que maneja el museo y otras actividades de la misma.
Foto: Gentileza
Una de sus caracerísitcas principales, es sin duda, su gran diseño arquitectónico. Las paredes exteriores están cubiertas con 16,000 toneladas de mármol travertino de color blanco, combinadas entre las curvas con elementos naturales. Y el hermoso jardín en la plaza principal cuenta con una gran colección botánica.
El museo Getty recibe 1.800.000 visitantes aproximadamente al año, siendo así uno de los más concurridos en Estados Unidos y el acceso es gratuito. Para llegar hasta ahí, se puede caminar o tomar una tranvía que asciende por la colina de Brentwood. Y durante el ascenso, se puede disfrutar del paisaje panorámico de la ciudad de Los Ángeles.
El museo se divide en 4 pabellones: sur, norte, este y oeste, distribuyendo sus colecciones en orden cronológico. Alberga numerosas piezas de pinturas, grabados, esculturas, manuscritos, objetos de arte decorativo, fotografía, joyas, adornos, monumentos, entre otros.
Foto: Gentileza
La historia detrás del nombre
Un dato curioso sobre su fundador, es que John Paul Getty siendo uno de los hombres más millonarios, era exageramente mezquino con todos, excepto con el arte. Los locales cuentan que gastaba millones de dólares para adquirir obras de arte y vivía en una lujosa residencia decorada con las obras de los grandes artistas que admiraba.
Sin embargo, cuando su nieto fue secuestrado en 1973 por la mafia italiana, se negó pagar su rescate. La mafia envió la oreja cortada del nieto para presionarlo y aún así no lograron. Finalmente, el padre del secuestrado pagó su rescate haciendo un préstamo de John Paul Getty con una tasa de interés de 4% anuales.
La historia de la familia Getty es una secuencia de secuestros, adicción y suicidios que para muchos no precisamente refleja la grandeza de sus museos. La vida trágica de la familia Getty fue recreada en 2017 en la película “Todo el dinero del mundo“ (All the money in the world).
