Estilo de vidaSí, la talasofobia existe, y se trata de un miedo intenso y exagerado al océano, que nace de forma irracional y provoca ataques de pánico con solo acercarse al mar.
Del griego “Thalassa” (océano) y “Phobos” (miedo)”, la talasofobia es reconocida por la medicina, y son varias las causas que pueden provocarla. Una de las más comunes, según los psicólogos, es la que está relacionada con alguna experiencia traumática en el entorno marítimo en el pasado: desde ahogamientos, naufragios, accidentes acuáticos o alguna pérdida relacionada con el mar.
Asimismo, se considera que el hecho de no saber qué hay en las profundidades del océano es un motivo para sentir ese terror incontrolable. Como no es trastorno racional, es decir el pánico actúa por encima de la razón, los que la padecen no pueden subirse a un barco, meter los pies en la orilla y mucho menos darse un chapuzón en la ribera.
Generalmente, esta fobia tiene origen en la niñez o infancia, por eso es importante hacer terapia con profesionales que puedan ayudar a superarla.
La talasofobia presenta los mismos síntomas que cualquier otro miedo extremo: desde mareos leves, taquicardias, palpitaciones, náuseas, sequedad en la boca y hasta dificultad para hablar y pensar con claridad. Por eso, es importante tratarla con un psicólogo que ayude a disminuir el miedo o lo elimine por completo, para que así el paciente pueda volver a disfrutar de la paz que trae el mar.
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