GastronomíaLa cerveza es una de las bebidas más consumidas en el mundo y está comprobado que tiene beneficios para el organismo, siempre que se consuma con moderación. Recientemente se incorporó su versión 0% alcohol y cada vez son más los adeptos.
Esta bebida tan popular suele ser la excusa de muchas personas para reunirse y compartir un buen rato, el problema es que con los excesos se puede experimentar diferentes malestares producidos por el alcohol, propio de su versión original. Esto con la cerveza sin alcohol no sucede, de hecho, favorece al buen funcionamiento del organismo.
Es la única bebida que tiene lúpulo, un sedante suave y amargo que estimula el apetito, su compuesto de malta le proporciona los carbohidratos, minerales, elementos trazas, ácidos orgánicos y vitaminas.
Su poder refrescante se le atribuye al agua, el gas carbonatado y los 20 aminoácidos esenciales y no esenciales que posee. Al ser rica en potasio y sodio se convierte en un eficaz diurético, y favorece la circulación sanguínea de la mucosa bucal y los procesos digestivos.
Entre las vitaminas que posee se destacan la A, B6, D y E, y juntos a sus polifenoles se convierte en un eficaz antioxidante previniendo diferentes enfermedades.
A diferencia de la tradicional, la cerveza sin alcohol hidrata el cuerpo y hasta se puede consumir después de finalizar un entrenamiento, así lo afirmó una serie de expertos del Centro Superior de Investigaciones Científicas. También posee muchísimo menos calorías, lo que la vuelve apta para todo tipo de dietas.
Gracias a su escaso contenido en sodio, la cerveza sin alcohol puede ser una opción muy recomendable para las personas que sufren hipertensión arterial y su aporte de ácido fólico previene la anemia y problemas relacionados al déficit de nutrientes.
Las únicas personas que realmente no son aptas para beber esta infusión espirituosa son aquellas que tengan diabetes, esto se debe a que tiene un alto índice glicémico, así lo explica la Dra. Eliana Reyes, nutrióloga e integrante del programa de Obesidad y Diabetes de Clínica Universidad de los Andes.
