ActualidadDurante décadas, la capa de ozono de la Tierra que protege al planeta de los rayos ultravioleta (UV) fue golpeada de diferentes formas, pero gracias a un esfuerzo global los daños están disminuyendo favorablemente.
Los científicos descubrieron un enorme agujero sobre la Antártida en 1985 y un par de años después, países de todo el mundo adoptaron el Protocolo de Montreal, un esfuerzo global para eliminar gradualmente las “sustancias que agotan la capa de ozono”. Gracias a ese trabajo, actualmente ya comienza a parecerse más a su estado normal.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) comunicó que la capa de ozono se está recuperando y que los agujeros fueron disminuyendo favorablemente. Y como las moléculas de ozono en la estratosfera son las que absorben la dañina radiación del sol, impiden que gran parte de ellas nos llegue, lo que reduce el riesgo de cáncer de piel y cataratas en las personas, así como el daño solar en plantas y cultivos.
Para el 2066, estiman que la capa de ozono vuelva a ser lo que era, antes de que existiera ese enorme agujero. Por supuesto, ese progreso depende del mantenimiento de políticas que limiten los químicos que la dañan y que además ayuden a frenar el cambio climático, y es que el mundo ya se ha calentado alrededor de 1,2°C desde la era preindustrial, lo que provoca muchos de los desastres climáticos extremos con los que vivimos hoy.
Advertencia climática
El panel de expertos de la OMM advierte que la “geoingeniería”, que se refiere a manipular intencionalmente el clima y/o la atmósfera para deshacer parte del daño que hemos causado al quemar combustibles fósiles, podría afectar potencialmente la capa de ozono. Están particularmente preocupados por una táctica llamada inyección de aerosol estratosférico (SAI).
Los defensores creen que la táctica podría ayudar a enfriar el planeta porque los aerosoles podrían reflejar parte de la luz solar hacia el espacio. Pero SAI “viene con riesgos significativos y puede causar consecuencias no deseadas”, según un informe respaldado por la Organización Meteorológica.
Ya algunos expertos en clima han hecho sonar las alarmas sobre el reciente intento de liberación de partículas reflectantes de azufre en la estratosfera por parte de una startup. Sin embargo, la eliminación gradual de los productos químicos que agotan la capa de ozono se presenta como un ejemplo de lo que podemos lograr cuando abordamos juntos una crisis ambiental global.
“La acción del ozono sienta un precedente para la acción climática. Nuestro éxito en la eliminación gradual de los productos químicos que devoran la capa de ozono nos muestra lo que se puede y se debe hacer, con carácter de urgencia, para alejarse de los combustibles fósiles, reducir los gases de efecto invernadero y, por lo tanto, limitar el aumento de la temperatura”, informó la OMM a través de un comunicado.
