A medida que pasa el tiempo y los avances médicos siguen impulsando la esperanza de vida, los científicos explican que actualmente la esperanza de vida más larga posible de un ser humano es de 150 años.
La persona viva más vieja del mundo es Kane Tanaka. A los 118 años, es la tercera persona viva verificada más vieja de la historia. La investigación publicada en Nature Communications en mayo de 2021 encontró que de 120 a 150 años es el “límite absoluto de la esperanza de vida humana”.
Usando modelos matemáticos para analizar datos médicos (anónimos) de más de 500,000 personas en los Estados Unidos, el Reino Unido y Rusia, los investigadores encontraron que este rango de edad es cuando el cuerpo pierde completamente la resiliencia, o su capacidad para recuperarse de una enfermedad y lesión.
La clave para vivir una vida larga y placentera es aumentar la duración de su salud, la cantidad de años sin enfermedades que una persona puede vivir. Para ayudarlo a acercarse lo más posible a 150, te compartimos algunos de los mejores consejos de expertos en longevidad para mantenernos saludables.
8 CONSEJOS DE LONGEVIDAD PARA AYUDARTE A VIVIR MÁS TIEMPO Y MEJOR
1. Seguí la fórmula nutricional de “cinco al día”
Mantenerse al tanto de los requisitos nutricionales puede ser complicado, por lo que los investigadores de la Escuela de Salud de Harvard buscaron hacerlo más fácil con una fórmula de cinco al día respaldada por la ciencia. Todo lo que necesita consumir son dos porciones de frutas y tres porciones de verduras al día. “Esta cantidad probablemente ofrece el mayor beneficio en términos de prevención de enfermedades crónicas importantes y es una ingesta relativamente alcanzable para el público en general”, dice el autor principal del estudio, Dong D. Wang, MD, ScD, epidemiólogo, nutricionista y miembro de la facultad de Harvard Medical School y Brigham and Women’s Hospital en Boston.
2. Pasá tiempo sentado en el suelo
En Japón, que es el hogar de muchas de las personas más ancianas del mundo, es una práctica común sentarse en el suelo. “Pasé dos días con una mujer de 103 años y la vi levantarse y bajar del piso 30 o 40 veces, por lo que son como 30 o 40 sentadillas diarias”, dice el fundador de Blue Zones, Dan Buettner . Ser capaz de levantarse y bajar desde una posición sentada con las piernas cruzadas es una práctica que se realiza en estas zonas. Según una investigación publicada en la Revista Europea de Cardiología Preventiva, aquellos que eran menos capaces de completar este movimiento tenían cinco o seis veces más probabilidades de morir que aquellos que eran más capaces de completar la tarea.
3. Hacé ejercicio con regularidad
Todos sabemos que hacer ejercicio con regularidad puede ayudarlo a vivir una vida más larga. Y un estudio de noviembre de 2020 publicado en JAMA Internal Medicine encontró que aquellos que realizan ejercicio moderado o vigoroso 150 minutos por semana tenían una menor mortalidad por todas las causas, o muerte por cualquier causa. Este marcador de 150 minutos se alinea con las recomendaciones de ejercicio de la American Heart Association.
4. Sé optimista sobre el envejecimiento
Si anticipa que lo pasará fatal en la vejez y no hace nada para evitar que eso suceda, lo más probable es que lo haga. Si es optimista sobre el envejecimiento, es más probable que tome las medidas ahora que pueden ayudarlo a vivir una vida más feliz y más larga , muestra un estudio de diciembre de 2020 publicado en The International Journal of Aging and Human Development . “Lo que la gente lee, ve y escucha sobre la vida posterior afecta su percepción de la vejez, incluso cuando son jóvenes. Y si tienen estereotipos negativos, los llevan consigo durante toda la vida y, finalmente, internalizan la negatividad “, dice Shelbie Turner, coautor del estudio. “Luego nos preparamos para una profecía de realización personal en la que solo esperamos pérdida y declive en la vejez, por lo que no estamos motivados para participar en comportamientos de salud que puedan prevenir o retrasar las consecuencias negativas del envejecimiento”.
5. Gestiona el estrés
El manejo del estrés es mucho más que relajarse. Cuando maneja su estrés, puede afectar la actividad de sus genes. “Tenemos alrededor de 22,500 genes, pero solo 1,500 de ellos están activados al mismo tiempo”, dice Michael Roizen, director de bienestar de la Clínica Cleveland. Explica que el manejo del estrés puede desactivar los genes que conducen a la inflamación, lo que puede provocar problemas como artritis y enfermedades cardíacas. “Qué genes están activados o desactivados están bajo su control”, dice el Dr. Roizen. “Lo que significa que cuánto tiempo vives y qué tan bien estás a la altura de la era actual está bajo tu control”.
6. Viví en el presente
Cuando Daniel Kennedy, director y productor de la serie documental Healthy Long Life , habló con centenarios en México sobre sus vidas y prácticas, descubrió que vivían el momento. “[Muchas de las personas que conocí] no se enfocan en el ayer ni en el mañana, se enfocan en el hoy”, resalta .
7. Practicá la compasión
Un estudio publicado en junio de 2020 en el American Journal of Preventive Medicine encontró que el voluntariado es un pasatiempo común entre quienes viven una vida larga. “Nuestros resultados muestran que el voluntariado entre los adultos mayores no solo fortalece las comunidades, sino que enriquece nuestras propias vidas al fortalecer nuestros lazos con los demás, ayudarnos a tener un sentido de propósito y bienestar y protegernos de los sentimientos de soledad, depresión, y desesperanza “, dijo Eric S. Kim, PhD , científico investigador de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard, en un comunicado de prensa sobre el estudio.
8. De inspiración: la dieta mediterránea
Escuchará a los expertos recomendar la Dieta Mediterránea una y otra vez, y eso es porque es muy buena. Se centra en grasas saludables, nueces, semillas, legumbres, frutas, verduras, cereales integrales y mariscos. “La dieta mediterránea no es un conjunto específico de reglas y restricciones, lo que hace que sea mucho más fácil de adoptar que otras dietas de moda”, dice la dietista registrada Tracy Lockwood Beckerman, en el reporte a Well and Good.
“Tiene un respaldo científico serio y no tiene por qué ser muy caro”. Una investigación publicada en la revista médica Gut en junio de 2020 encontró que seguir la Dieta Mediterránea puede ayudar al proceso de envejecimiento al reducir los marcadores de inflamación y aumentar tanto la función cerebral como la salud intestinal.
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