Llevar un look natural y fresco es lo último en tendencia de belleza y maquillaje. Básicamente se trata de lucir una piel radiante y con un aspecto como si no nos hubiéramos aplicado ningún producto, parece complejo pero en realidad no lo es y te contamos cómo lograrlo.
Muchas celebridades han lucido este estilo de make up en pasarelas y eventos, y se podría decir que es uno de los que llegó para instalarse. Lo mejor de todo es que no es necesario tener demasiados conocimientos, sino contar con la combinación justa de skincare y maquillaje.
Para lucir una piel tersa y radiante es importante cuidarla, así como adquirimos hábitos de higiene rutinario, debemos ocuparnos de la limpieza de nuestro rostro, la hidratación y protección solar. Estos tres pasos son clave para tener un cutis luminoso y delicado. Un tip extra es implementar agua termal luego de la ducha, esto le brindará al rostro una hidratación instantánea.
Utilizar un primer hace mucha diferencia a la hora de maquillarnos, este funciona como acondicionador de la piel, la prepara para que el rostro luzca suave y reduzca el tamaño de los poros e inclusive suaviza la apariencia de las arrugas.
Un maquillaje natural y de efecto glowy se logra con una base de cobertura ligera, que brinde un terminado luminoso, como si no nos hubiéramos aplicado nada. Para ellos hay que optar por un producto que vaya acorde a nuestro tipo de piel y que no sea matificante.
Para tapar y corregir las ojeras hay que elegir un tono menor al color de nuestra base, pero tampoco debemos excedernos a una numeración muy clara, sino parecerá que nos pintamos con corrector blanco. Esto es importante para lograr el acabado que buscamos, la mejor manera de difuminarlo es con una esponja húmeda, o la yema de nuestros dedos. Recordá siempre lavar tus manos antes de tocarte la cara.
El rubor nos brinda dimensión y color en el rostro, lo puede afinar, dar luz y brillo, para crear un cutis glow basta con colocar unos toques en la mejilla, de forma ligera y sin excederse.
En cuanto a los ojos, lo ideal es arquear las pestañas de ser necesario y no aplicar más de dos capas de rímel. Se puede dar color a los párpados pero las sombras deben ser en tonos suaves como el rosa, durazno o dorado, si usamos paletas oscuras estaremos perdiendo la esencia natural.
Por último, para los labios se puede usar tonos nude, rosa suave o un bálsamo para darle un toque extra de brillo y grosor.
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