Estilo de vidaSe manifiesta después del parto como fuertes sentimientos de tristeza, ansiedad y cansancio que dificultan a la madre cuidar de sí misma y de su bebé. La psicóloga Fátima López Moreira nos comenta las causas y cómo reducir su gravedad.
Por: Verónica Giménez
La depresión posparto, también llamada depresión posnatal, es una afección médica que padecen muchas mujeres después de dar a luz. “Puede presentarse de forma moderada a intensa poco después del parto o hasta un año más tarde, incluso en ocasiones ya empieza durante el embarazo”, explica la profesional.
A menudo esta depresión aparece dentro de los primeros tres meses después del nacimiento del bebé y puede ocurrir a cualquier mujer, ya que al ser madre experimentan cambios hormonales, físicos, emocionales, financieros y sociales.
“Las posibles causas son la preocupación en ser una buena madre, los cambios hormonales que se experimentan, la falta de descanso, la diferencia que se presenta durante un tiempo en las relaciones laborales y sociales. También puede desarrollarse por los cambios en el cuerpo o por disponer de menos tiempo y libertad para sí misma”, detalla.
Y agrega: “Otras de las tantas razones que llevan a la depresión es cuando el embarazo no fue planeado o si se tuvo sentimientos contradictorios sobre la llegada de un hijo, o bien, si la madre vivió un hecho estresante durante la gestación o el parto”.
Menciona además que entre las posibles causas se encuentra los trastornos de bipolaridad o ansiedad antes del embarazo o en un embarazo anterior, una mala relación con la pareja o ciertos problemas económicos.
Síntomas de la depresión en la maternidad
Los síntomas varían de leves a graves y pueden aparecer una semana después del parto o gradualmente, incluso hasta un año después. Como suelen durar varios meses, es importante acudir lo antes posible a un especialista.
“Por lo general, las madres desarrollan irritabilidad, cambios en el apetito, dificultad para dormir, sentimiento de inutilidad o culpa, se muestran retraídas, poco enérgicas, con falta de concentración, pierden el interés en la mayoría de las actividades, y manifiestan problemas para realizar las tareas en el hogar o el trabajo”, indica.
En casos más graves, desarrollan pensamientos de muerte o suicidio, tienen sentimientos negativos hacia su bebé o incluso piensan en hacerle daño. “Una madre con depresión posparto también puede ser incapaz de cuidar de sí misma o de su bebé, sentir temor de quedarse sola con su hijo, y preocuparse intensamente o tener poco interés en él”, describe.
¿Cómo reducir la gravedad de la depresión posparto?
La psicóloga Fátima López Moreira comparte algunas recomendaciones que contribuyan a mejorar la condición de la madre. Es importante que la mujer no se sienta sola, sea consciente que no es su culpa y tenga conocimiento que existe ayuda para tratar este trastorno mental.
“Las madres deben tener un apoyo social bueno por parte de su familia, amigos y compañeros de trabajo, ya que la empatía y el afecto puede ayudarlas a reducir la gravedad de la depresión posparto”, puntualiza.
Aconseja que las madres que atraviesan por esta situación no escondan sus sentimientos y hablen de ellos, no haga ningún tipo de cambios mayores en su vida durante el embarazo o inmediatamente después de dar a luz y no intenten hacer demasiado o ser perfectas.
“También es clave que se hagan de tiempo para salir, visitar a sus amigos o pasar tiempo de calidad con su pareja, descansar cuando el bebé esté durmiendo, conectar con otras madres o unirse a un grupo de apoyo”, sugiere.
El tratamiento para la depresión después del parto con frecuencia incluye medicamentos, terapia o ambos.
