EntretenimientoLas películas nos distraen, divierten, generan emociones y siempre nos invitan a reflexionar sobre diferentes situaciones de la vida. Es un pasatiempo provechoso en muchos aspectos y verlas en familia también. Aquí te contamos.
Cada miembro de la familia tiene sus gustos y preferencias, y muchas veces cuesta coincidir entre ellas, especialmente entre niños y adultos, sin embargo, el cine puede ser ese punto medio para coincidir y disfrutar de una misma actividad y pasar así más tiempo juntos.
Independientemente del género, los filmes cuentan historias donde, en algún punto, los protagonistas se tienen que enfrentar a diferentes desafíos para llegar a una resolución y así tener su “final feliz”. Esta capacidad de resiliencia transmite todo tipo de valores que tanto niños como adultos pueden aprovechar.
Además, muchas de las películas de superación están basadas en hechos reales, lo cual también favorece a la empatía, que las personas se sientan motivadas y a desarrollar su creatividad.
Así como los adultos se estresan con las demandas diarias, los niños también pueden sentirse así, ya sea por los deberes escolares o porque están experimentando situaciones emocionales nuevas. La tensión se hace presente y una buena manera de gestionarla es viendo una película. Este momento de desconexión con la realidad los ayudará a relajarse y alejar la mente de las preocupaciones.
Así también las películas catalogadas ATP (aptos para todo público) están inspiradas en diferentes ciencias y deportes, mostrando escenarios que no vemos cotidianamente y ayudando a fomentar la reflexión sobre esos aspectos. Sobre todo si demuestran interés por algunos de esos campos.
A veces los padres sienten que no tienen temas de conversación con sus hijos o viceversa. Y ver una película en familia es una buena manera de propiciarlo. Se puede conversar sobre los puntos de vista de cada uno y esto ayudará a fortalecer los vínculos, crear un diálogo más fluido y conocerse mejor en otras facetas.
