Para tener un cutis radiante y saludable es importante mantener una serie de cuidados que hayn sido indicados por un especialista y vayan acorde al tipo de piel. Dentro de esa rutina, un paso clave es la mascarilla, por eso te compartimos específicamente de este mineral.
La contaminación ambiental, el maquillaje, la acumulación de sebo y las células muertas generan una capa que obstruye los poros del rostro, con el tiempo esto deriva a una dermis apagada y con acné, y especialmente a los antiestéticos puntos negros y espinillas.
Estos, casi siempre, aparecen en la zona T -frente, nariz y mentón- y la manera de prevenir su aparición es realizando limpiezas profundas y asistiendo con una dermatóloga que indique cuáles son los productos que se deben usar.
También puede suceder que aparezcan por desequilibrios hormonales, pero cualquiera sea el caso, la mascarilla de carbón es un buen complemento en la rutina de skin care y hasta se puede preparar en casa.
¿Cómo funciona?
Este producto ayuda a absorber el exceso de grasa en la piel y facilita la eliminación de impurezas. Entre sus bondades se destaca que:
- Posee propiedades astringentes y exfoliantes que regulan la producción de sebo.
- Tiene aminoácidos esenciales y antioxidantes que estimulan la regeneración celular y previenen la aparición prematura de marcas de expresión.
- El carbón, uno de sus compuestos principales, posee propiedades emolientes que ayudan a remover las espinillas.
Para prepararlo en casa
Si bien se puede conseguir este producto en cualquier farmacia o tienda de estética, también es posible elaborarla en casa con tres ingredientes: gelatina sin sabor, leche y carbón activo -que se consigue en herbolarias, farmacias y estéticas-.
Procedimiento: Colocá una cucharada de gelatina sin sabor y dos cucharadas de leche en un recipiente apto para microondas. Mezcla hasta que no queden grumos y esté todo bien integrado, luego calentá durante 15 a 20 segundos en el microondas.
Pasado ese tiempo, lo siguiente es aplicar a la mezcla 1 cápsula de carbón activado y mezclar bien. Una vez que esté lista la pasta, hay que dejar reposar durante 10 minutos.
¿Cómo se usa?
Lo primero es limpiar el rostro y retirar cualquier resto de maquillaje que pueda haber. Vas aplicar una capa de mascarilla con ayuda de un pincel en las zonas donde se acumulan los puntos negros y la oleosidad.
Dejá que repose en el rostro durante 20 minutos, vas a notar que una vez seca queda como una capa que se puede retirar con la yema de los dedos. Es importante que levantes la mascarilla con cuidado, enjuagues tu rostro con agua fresca y apliques un hidratante. Repetí este proceso 1 o 2 veces por semana.
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