La mayoría de las mujeres experimentan la caída del cabello posparto y aunque es muy común, afecta el bienestar de la nueva mamá. Pero, ¿por qué ocurre y cómo combatir esta condición capilar?
El embarazo provoca cambios hormonales que mantiene a la melena en la etapa de crecimiento capilar, sin embargo, en los primeros 3 a 6 meses después del parto, el cabello entra en las fases de caída y reposo, a causa de una pérdida repentina de hormonas. Esto puede ser el resultado de deficiencias nutricionales, caspa e hipotiroidismo.
En el caso que se encuentre atravesando por una depresión posparto, la pérdida de cabello puede ser un factor adicional del estrés y, por lo tanto, debe abordarse lo antes posible para mejorar el bienestar de la mujer y el bebé. Y es que perder una cantidad significativa de cabello impacta negativamente en la salud mental y emocional de la mamá.
La buena noticia es que la pérdida de cabello después del embarazo suele ser temporal, ya que tras nueve meses de niveles fluctuantes de hormonas es normal que al cuerpo le lleve algún tiempo regularizar su ritmo biológico.
Uno de los primeros pasos para abordar la pérdida de cabello posparto es investigar el factor causal más probable, que suele ser una deficiencia nutricional en hierro y vitamina D3, que al tratarse produce una importante mejora en el crecimiento capilar, pero también existen otros factores que desarrollan esta condición.
¿Cómo combatir?
Reduce los niveles de estrés. El aumento en la hormona cortisol puede tener un efecto perjudicial en el crecimiento del cabello. Por eso, para controlar la caída es esencial hacer un esfuerzo consciente que reduzca los niveles de estrés tanto como sea posible. Esto puede parecer una tarea desalentadora, pero es el primer paso para lidiar de manera efectiva con dicha condición, y una forma de disminuir el estrés es incorporando yoga, meditación y 15 minutos de ejercicios de respiración en tu rutina diaria.
Mejorar la nutrición. Aumentar la ingesta de alimentos ricos en hierro y productos lácteos. Esto se puede lograr mediante la incorporación de una variedad de alimentos en la dieta, como vegetales de hojas verdes, legumbres, pasas, dátiles, azúcar moreno y vísceras. El embarazo puede afectar la nutrición general de la madre, por lo que es importante reponer sus reservas de nutrientes. Además de cuidar tu salud física, también debes priorizar su bienestar mental y buscar el apoyo de amigos y familiares.
Priorizar tu salud mental. La tensión física y emocional de dar a luz y adaptarse a la vida con un bebé puede afectar significativamente el bienestar mental de una mujer. Por eso, al priorizar tu salud y controlar los niveles de estrés, la caída del cabello puede llegar a detenerse completamente.
No ignores tu problema capilar. Muchas madres pueden sentirse obligadas a reprimir cualquier sentimiento de ansiedad o angustia emocional que puedan tener al respecto. Pasar por alto y no prestar la debida atención a esta condición puede ser un grave error porque pueden estar involucradas deficiencias nutricionales subyacentes que si no se abordan, progresan con el tiempo y pueden tener un mayor impacto en la salud de la mujer más adelante.
···¿Ya nos seguís en las redes? Mirá todo lo que tenemos para VOS Facebook l Twitter l Instagram